No cabe duda de que hacer ejercicio tiene múltiples beneficios para la salud. Desde mejorar el estado de ánimo, ayudarnos a bajar de peso, reducir el dolor crónico, hasta proteger la memoria y las capacidades intelectuales a medida que envejecemos, etcétera, se ha comprobado una y otra vez que el ejercicio puede ser una de las claves para una vida larga y sana. Pero, ¿cómo podemos sacar el máximo provecho de nuestros esfuerzos? O, en particular, ¿hay un momento ideal, digamos, del día para hacer ejercicio? Sucede que sí, al menos en cuanto a la salud del corazón y el riesgo de derrame cerebral. El mes de febrero, se publicó en la revista médica European Journal of Preventive Cardiology, un estudio en el que investigadores observaron durante seis años, que de sus más de 85,000 participantes, los que solían realizar ejercicio al final de la mañana tuvieron un riesgo significativamente menor de padecer enfermedad arterial coronaria o experimentar un derrame cerebral, en comparación con los que tendieron a hacerlo en otros momentos. Tan poderoso era el impacto que tenía hacer ejercicio al final de la mañana que esto fue aún más determinante que la cantidad de ejercicio que se realizara. "Se encontró que los participantes que eran más activos por la mañana, independientemente de su nivel medio total de actividad física diaria, tenían un menor riesgo de incidencia de la enfermedad cardiovascular y derrame cerebral", afirmaron los investigadores. Los datos de ejercicio de los participantes fueron obtenidos del UK- Biobank, gran estudio de "biobanco" a largo plazo en el Reino Unido iniciado en 2006. Como parte obligatoria de este, los involucrados llevan pulseras de actividad que monitorean tanto sus niveles de actividad como horarios de ejercicio. Los investigadores explicaron que uno de sus motivos principales para llevar a cabo su estudio examinando cuál es la mejor hora del día para realizar ejercicio para la salud cardiovascular, era que hasta obtenerse sus resultados, muy poco se sabía al respecto.